Solusoft ha obtenido la certificación ISO 9001:2000 para su Sistema de Gestión de la Calidad. La certificación ha sido otorgada por BVQi, acreditada por ENAC, Entidad Nacional de Acreditación, para realizar esta labor en España.
solusoft ha firmado un acuerdo con la firma mTactics por el que, dentro de la línea de negocio de movilidad, se convertirá en integrador homologado de las herramientas desarrolladas por dicha compañía.
Tras los virus y gusanos que tanto perjudican a nuestros sistemas informáticos, otra plaga se está extendiendo "gracias" a Internet: el Spyware. No se trata de nada nuevo, pero sí que está alcanzando grandes proporciones en los últimos tiempos, amparándose en el aumento del ancho de banda con que empezamos a conectarnos los usuarios, quienes, por ello, apenas notamos la invasión.
Esta certificación supone sin duda un paso más en el desarrollo cualitativo de la Compañía, confirmando la validez y madurez de las metodologías y de los procedimientos puestos en marcha para ofrecer respuestas eficaces a las necesidades de sus clientes.El esfuerzo y la dedicación de todo el equipo de SOLUSOFT se ve así recompensado, sirviendo además como motivación para continuar trabajando en la misma línea, y seguir consiguiendo la satisfacción de los clientes y su fidelización, de la que tanto nos orgullecemos.
El trabajo de SOLUSOFT, se desarrollará en dos líneas de actuación. Por un lado comercializando e implantado dichas soluciones entre su extensa cartera de clientes. Por otro lado, integrándolas con los sistemas de información de los clientes que quieren añadir a los mismos las funcionalidades de movilidad que la plataforma de mTactics proporciona. La línea de aplicaciones móviles para empresas mReporting permite, sea cual se la actividad de su compañía, movilizar los procesos de consulta y reporte de información de sus profesiones en movilidad. Todas ellas ofrecen tiempo real, uso sencillo e intuitivo y acceso multidispositivo.
Aunque, como decimos, la plataforma puede adaptarse a los requisitos de cualquier actividad, existen ya una serie de parametrizaciones verticales especialmente preparadas para dar respuesta a sectores que encuentran grandes ventajas en el aprovechamiento de la movilidad:
A los virus y gusanos, a los que empezamos a estar acostumbrados y contra los que hemos empezado a protegernos mediante programas antivirus se les unen ahora otros tipos de, cuando menos, molestas aplicaciones que van en contra de nuestra intimidad y perjudican el rendimiento de nuestros equipos: el Spyware. Conjuntamente con los primeros, y entre otros, forman lo que ha dado en llamarse Malware, término acuñado por la combinación de los vocablos Malicious y Software. Contra todos ellos empieza a lucharse de manera conjunta tanto por los sistemas antivirus como por los cortafuegos (firewall).
¿Qué es el spyware?Técnicamente se trata de aplicaciones o ficheros que, en mayor o menor nivel, espían nuestras acciones, extraen información y comunican ésta, a través de Internet, a nodos o servidores que están preparados para recibirla.Según declaraciones de Steve Bellovin, de AT&T, en el Internet Global Congress (IGC), se cree que un 70% de los equipos conectados a Internet están infectados por alguno de estos programas.En los niveles menos dañinos, por ejemplo, nos podemos encontrar con sistemas que espían nuestras conexiones a Internet y analizan el tipo de páginas que visitamos, comunicando dicha información a sus creadores, para que puedan venderla a empresas de márketing y publicidad.Los sistemas de spyware son activados incluso por nuestra propia acción. Sin darnos cuenta, por ejemplo, cuando nos conectamos a algunas páginas Web. O cuando descargamos determinados programas gratuitos (freeware), que esconden a estas aplicaciones en su interior. A veces los programas gratuitos esconden incluso la aceptación de su instalación y funcionamiento en las licencias que aceptamos para descargarlos o utilizarlos, aprovechándose del bajo porcentaje de veces en que éstas son realmente leídas o haciendo además que el mecanismo de espionaje que estamos validando aparezca en ellos de forma poco clara.También puede que seamos conscientes de su existencia. En ocasiones, un usuario puede aceptar determinado "nivel de espionaje" a cambio de poder utilizar un software gratuito que realmente le interese.
¿Cómo descubrirlo?Si no hemos sido conscientes de la instalación de este tipo de software, puede empezar a pensarse que estamos hospedando a alguno de estos intrusos cuando notemos los siguientes síntomas:
¿Cómo protegernos?Como hemos apuntado ya arriba, los sistemas antivirus y cortafuegos (firewall) comienzan ya a preparar sus programas para luchar también contra el software de espionaje conjuntamente con el resto del maleware del que se ocupan. Es bueno que dispongamos de un sistema para poder bloquear en nuestro equipo aquellos puertos de comunicación que no utilizamos y que, a veces inexplicablemente, aparecen abiertos por una mala configuración o una vulnerabilidad del software que tenemos instalado.Pero, aparte de los antivirus y los cortafuegos, existen ya un conjunto de programas que tratan de forma específica este problema, detectando los intrusos que se encuentran ya alojados en nuestro sistema, y ayudándonos incluso a diagnosticar e inmunizar posibles vulnerabilidades de seguridad en nuestro sistema, como lugares típicos donde se sabe que podemos esconder claves o información sobre las últimas conexiones realizadas.Son programas económicos, como PestPatrol, que nos pueden librar de muchas incomodidades y mantener a salvo nuestra intimidad. O incluso gratuitos, como Spybot o Ad-ware.
La decisión se traduciría posiblemente en la obligación a Telefónica de que baje sus precios a mayoristas. Ésta cobra en la actualidad, por ley, 23,4 euros mensuales por cada línea que alquila a un mayorista, mientras que cobra 39 euros al mes a cada uno de los más de un millón de clientes finales a los que también ha comercializado dicho servicio.Para que los mayoristas puedan ofrecer el mismo servicio a precios competitivos, piden una bajada de sus tarifas para que aumente el margen.Se espera en cualquier caso que la bajada y la competitividad a la que dé paso se traslade en parte a los usuarios finales.
Si unimos esto al incremento de ventas, que han obtenido las empresas virtuales, del 51% en 2003, llevándolas a las más importantes a obtener beneficios por primera vez, podríamos empezar a pensar que, lejos del movimiento especulativo que llevó al sector tecnológico a la famosa explosión de la burbuja, un optimismo más realista estaba justificado.Parece, en definitiva, que Internet sí que puede ser un soporte real para excelentes negocios, siempre que éstos se asienten en una buena base, sobre procedimientos comerciales y productivos que funcionen.
Para finales del 2004 se han planteado un objetivo de contar ya con 300.000 certificados de empresas. Con ellos se trabaja en que se puedan realizar distintas funciones esenciales para que el uso de Internet sea realmente utíl, desde simplemente garantizar la identidad, hasta firmar contratos, facturas y comunicaciones fiscales, pasando por securizar sus intercambios de información, y el no repudio de los pedidos que se pudieran recoger por vía electrónica.